Las magnetoestrellas son estrellas de neutrones con un campo magnético extremadamente fuerte, el cual puede alcanzar valores de hasta 1011 T. Se trata de objetos con el campo más fuerte hasta ahora conocido en el Universo. La superficie de una magnetoestrella crea una corteza a partir de los neutrones y del campo magnético, en la cual ocurren terremotos magnéticos ("magnetómotos") repetidamente.
A lo largo del magnetómoto, las líneas de fuerza del campo magnético son perturbadas y deformadas hasta el punto de romperse y reconectarse hacia configuraciones más convenientes. Durante este proceso, una cantidad significativa de energía es liberada, lo cual calienta la corona magnética de la magnetoestrella. Se crea una envoltura caliente de electrones-positrones y fotones (materia caliente no hadrónica, bola de fuego) Los electrones y positrones son atrapados y contenidos por un intenso campo magnético, los fotones escapan en la forma de "llamaradas" de rayos X o de radiación gama suave. A estas estrellas de rayos X poco usuales les llamamos AXP (Anomalous X ray Pulsar o Pulsar de rayos X Anómalo) y en el caso de las llamaradas de rayos gama, SGR (Soft Gamma Repeater o Repetidor de Rayos Gama Suaves). En conjunto, de dichas fuentes se sabe que en nuestra galaxia hay más de diez. Las llamaradas se manifiestan a sí mismas a intervalos irregulares, y hablamos de la así llamada "fase activa de las magnetoestrellas". Algunas veces se alcanza una reconexión catastrófica de las líneas de fuerza magnéticas y un destello gigantesco se manifiesta, la cual es 1000 veces más energética que una llamarada repetitiva normal. Hasta ahora se han observado tres de estos casos (1979, 1998, 2004), en el último ocurrió la liberación de energía más grande hasta ahora, de hasta 1039 J.
Via/ Aldebaran